¿Y ahora qué? ¿Me quieres explicar qué hacemos los dos sentados frente a este mundo insatisfecho? En este último año siento que hemos alcanzado todos los despropósitos requeridos en cuanto a nuestro "dejarnos de amar a nosotros mismos". Tu por ahí colgado de aquella vida que, ya en tiempos, dejaste por no recaer en tremendas barbaries y yo... Yo atada a la silla que me mece las angustias...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
La frase final es demoledora, "la silla que me mece las angustias".
ResponderEliminarUna historia de desamor hacía si mismos expresada de forma muy bella.
Abrazos
Gracias Anita!
ResponderEliminar